En la edición del lunes, el diario cubano Granma, publicó una información respecto a un importante acuerdo entre el Ministerio de Salud Pública de Cuba y APIMONDIA (organización internacional de apicultores e investigadores de esta rama), ha posibilitado que el país sea una nación avanzada en el uso de esta medicina natural, con satisfactorios resultados en varias afecciones.

Este tipo de medicina con productos de la colmena y combinados con aceites esenciales de plantas, puede sustituir hasta en un 70% a los medicamentos empleados en la medicina convencional.

La Organización de Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, están implementando proyectos nacionales para la aplicación de apiterapia en países pilotos de Africa, tras la exitosa experiencia de Cuba, líder en programas de variante de esta medicina natural.

El profesor belga Roch Domerego, vicepresidente de APIMONDIA (organización internacional de apicultores e investigadores), dijo que trabajan de conjunto con el PNUD para desarrollar experiencias pilotos de apiterapia en Camerún y Burkina Faso.  

Alta calidad

En la región latinoamericana, Brasil y Argentina le siguen a Cuba en esta alternativa natural de curación. La miel cubana es de alta calidad y está cada vez más cerca de los requerimientos internacionales, indicó el profesor belga.

El doctor Guillermo Lázaro Prado González, de la clínica de medicina natural y tradicional del Instituto Carlos J. Finlay, manifestó que existen varios proyectos de colaboración, en unión de otras instituciones de Salud Pública, los cuales incluyen tratamientos intrahospitalarios y seguimiento por consultas.

Infecciones a repetición es uno de los temas de investigación del Finlay. A pacientes que padecen inmunodepresión, les aplican aromieles e inducen cambios en su estilo de vida: algunas modificaciones en la dieta, ejercicios respiratorios, yoga, gimnasia tradicional asiática.  

Qué se aplica

En apiterapia, se aplican distintas aromieles, para infecciones bronco-pulmonares, en las llamadas infecciones altas (otitis, laringitis, larinogotraquitis), en las bajas: neumopatías agudas inflamatorias y las cardiopatías inflamatorias, crónicas o agudas, asma bronquial, bronquiectasias (supuración pulmonar). En las gastritis, también tienen buenos resultados con aromieles cuando son producidas por el helicobácter.

"Atendemos pacientes y se les da seguimiento, hemos tratado dos mil casos en la clínica de medicina natural y tradicional del Finlay", señaló Prado González al diario cubano.

La doctora Concepción Campa, directora del Instituto Finlay, indicó que esta clínica surgió dentro de un centro productor de medicamentos convencionales, para demostrar cómo se puede combinar esa terapéutica con la natural. En un principio, los pacientes eran los trabajadores del Instituto y sus familiares, ahora su acción se ha multiplicado por los buenos resultados en la curación de variadas afecciones.  

En nuestra región

Motivados por esta información, fue que consultamos a técnicos del INTA, para saber cómo se está trabajando en la región cordillerana con los productos derivados de la miel.

Se nos explicó que si bien no se trabaja con aromieles, sí se denota una gran demanda de propóleo, utilizado como potente antiséptico, la jalea real como restaurador de tejidos, polem multifloral y miel multifloral que es la miel típica de nuestra zona.

En El Bolsón, por ejemplo, la gran demanda de miel y sus derivados ha originado la escasez: todo se vendió, inclusive hace una semana que no se consigue propóleo en esa localidad rionegrina.

Además se nos informó que profesionales de Córdoba estuvieron visitando la ciudad contactándose con técnicos de esa delegación del INTA, intercambiando conocimientos sobre apiterapia, notificándoles además de un trabajo sobre el tema elaborado por un profesional de La Pampa y dos profesores cubanos.

“Lo que todavía no se está haciendo es trabajar con el veneno de la abeja, que sabemos que es utilizado medicinalmente para los dolores reumáticos”, indicó el Ing. Agr. César Massacesse, del INTA EL Bolsón.  

Estracta: Diario El Oeste. (30/07/02)