Mallines, los humedales patagónicos
 

Recursos forrajeros de los mallines y vegas en la Patagonia Austral. (Foto: INTA). Más videos y fotos: Entrar.

El 2 de febrero de cada año se conmemora el Día Mundial de los Humedales. En recientes estudios científicos, los humedales patagónicos llamados mallines o vegas, han cobrado muchísima relevancia por tener un gran valor ecosistémico y económico.
 

Mallín

Etimológicamente, Mallín deriva del vocablo araucano malliñ que significa en idioma mapudungun, pradera cenagosa o bañado.

Los mallines deben incluirse entre los definidos como "humedales" o "wetlands" según la bibliografía internacional. En algunos sectores de Santa Cruz y Tierra del Fuego se utiliza para definirlos el término español "vega".

Estos ambientes son consecuentes de un largo proceso evolutivo en el que la humedad provista por una vertiente o cauce que aflora en un ambiente árido o semiárido, motiva una vegetación totalmente distinta de la que le rodea. A su vez esa misma flora, de enérgico desarrollo, aumenta el tenor de materia orgánica del suelo en que prolifera y retiene con sus abundantes raíces los materiales finos que, por arrastre, llegan al lugar. De esa manera se promueve la formación de un suelo esponjoso que absorbe y retiene el agua del cauce y la va distribuyendo por una superficie cuyo límite estará determinado por la cantidad de agua disponible y/o por diferencias de altura del terreno.

Geográficamente, se extienden, en nuestro país, desde Tierra del Fuego hasta Mendoza, y desde la Cordillera de los Andes hasta el Océano Atlántico, ocupando una superficie de 4.000.000 de hectáreas, equivalente al 4,5% de la Patagonia, distribuidas en diferentes áreas ecológicas de la Cordillera, Precordillera, Sierras y Mesetas, Región del Golfo y Estepa magallánica.

Se encuentran asociados a una gran variedad de comunidades, desde bosques lluviosos de Nothofagus hasta estepas en ambientes áridos y semiáridos. El principal disturbio natural que toleran los mallines, independientemente de su ubicación en el gradiente ambiental, son las grandes fluctuaciones de la napa freática.
 

Los mallines como recurso productivo

Los mallines constituyen el principal recurso productivo de la Patagonia árida excluyendo los valles irrigados. La producción natural de pasturas está relacionada con el acceso a fuentes de agua subterránea, a partir del flujo vertical ascendente desde la napa freática, mecanismo por el cual los mallines mantienen la humedad en el perfil del suelo.

Los mallines de la estepa patagónica, son ambientes típicos, de alta productividad de especies palatables, y las principales fuentes de forraje para la fauna silvestre y el ganado, por lo que su preservación tiene gran importancia. La potencialidad forrajera de un campo ganadero patagónico, esta determinada por la superficie ocupada por mallines utilizados con sistemas intensivos de pastoreo, optimizando su uso como reservas forrajeras en épocas desfavorables del año.

El cambio de estado de un mallín es provocado por causas naturales y/o antrópicas. Las causas naturales son producto de cambios eventuales como incendios, sequías extremas, vulcanismo o procesos geomorfológicos de transformación de paisaje.

Las causas antrópicas tienen su origen en el sobrepastoreo, acciones mecánicas por la agricultura, contaminación con agroquímicos mal uso de la tierra, la introducción de especies exóticas y en el secado para realizar construcciones.
 

Opiniones

Diversos investigadotes que trabajan sobre la importancia de los mallines como Estela Raffaele, del Centro Regional Universitario Bariloche, UNC; Ricardo Gandullo y Patricia Schmid, de la Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional del Comahue; el Ing. Agr. Aldo C. Cassola del Centro Regional Patagonia, INTA; Alexandra Bruce y Ana Cecilia Dufilho, de la Universidad Nacional del Comahue; el Lic. Luis B. Epele de la de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco; la Lic. Laura Varano de la Facultad del Ciencias Exactas y Naturales, Universidad de Belgrano, por nombrar algunos, coinciden que los mallines son muy importantes tanto ecológica como económicamente, pero esa afirmación hace paradójico que se sepa tan poco de ellos.
 

Compromiso conservacionista

Los vecinos integrantes de la Asamblea en Defensa de los Mallines del Chubut, desde hace tres décadas están pidiendo la protección de los mallines altos de Golondrinas.

Los vecinos del barrio "El Trébol" de Bariloche solicitaron por nota a la Intendencia Municipal, que detengan la edificación sobre el mallín denominado Laguna El Trébol, estudiada por la Universidad del Comahue. Esta construcción viola la Carta Orgánica Municipal que en su artículo 185 determina la protección de los humedales y su conservación en estado natural.

Héctor Zamborain, productor de Rucu Luan -zona de secano a 80 kilómetros al sur de Maquinchao- comenzó a invertir en el mejoramiento de mallines en el 2001 y hasta la fecha ha mejorado 320 hectáreas de estos humedales.

La ONG Conservación Patagónica de San Martín de los Andes, Neuquén, está defiendo desde el año 2009 la Vega Plana desde Villa Paur hasta la subida Pío Protto, 740 hectáreas con mallines que protegen de inundaciones al casco céntrico, que purifican el agua subterránea, brindan refugio a diversidad de aves y ofrecen un paisaje culturalmente tradicional. El Municipio por Ordenanza 8390 quiere secar estos humedales y urbanizarlos. Un claro negocio inmobiliario.
 

Proyecto de Ley

Con media sanción del Senado de la Nación se aprobó el proyecto de Ley de "Presupuestos mínimos para la conservación, protección, uso racional y sostenible de los humedales". La iniciativa debe ser aprobada por la Cámara de Diputados para convertirse en Ley.

La futura Ley crea el Inventario Nacional de Humedales, donde se individualizarán todos los humedales de origen natural existentes y la información necesaria para su adecuada conservación, control y monitoreo, incluyendo la cuenca hidrológica de la que forman parte.
 

Conclusión

Los humedales se encuentran entre los ecosistemas más afectados y con mayor amenaza de pérdida por las actividades humanas.

Solicitamos al gobierno nacional, a los provinciales y municipales, así como a la comunidad toda, conservar estos mallines prioritarios por el potencial agro-productivo patagónico extra-andino, por los importantes servicios ambientales que prestan y por la fauna silvestre que conviven en ellos.  

Créditos:

• Por Norberto Ovando. Vicepresidente de la Asociación Amigos de los Parques Nacionales -AAPN- Experto de la Comisión Mundial de Áreas Protegidas - WCPA - (02/02/14).