"Capital del Viento" |
|
En la cruz que enclavaron en el cerro, los fieles de la parroquia Domingo Savio se prepararon para el sábado de gloria.El relato bíblico del camino establece una serie de estaciones en las cuales se reedita cada uno de los calvarios que sufrió Jesús desde el pretorio hasta el calvario.
Así, los creyentes hicieron una peregrinación espiritual donde se revivieron los misterios centrales de la fe. Como todos los años, la gente participó activamente de las distintas propuestas para reavivar la fe.
En la Parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, el camino de la cruz comenzó con la representación de la primer estación donde Jesús es condenado a muerte. Allí, los participantes revivieron la situación en que ante Poncio Pilatos y los sumos sacerdotes se presentan Jesús y Barrabás.
Luego, los fieles marcharon por Kennedy encabezados por el padre Adrián y con el acompañamiento de dos móviles de la Dirección de Tránsito que fueron abriendo paso durante toda la procesión.
Recrean las estacionesApenas salieron de la iglesia hubo una puesta en escena de la estación número 2 donde Jesús carga con la cruz. Frente a la plaza «Manuel Cardo», se interpretó la tercera estación donde Jesús se cae por primera vez y así prosiguió la marcha de feligreses católicos que evocó cada momento del Vía Crucis.
La muchedumbre marchó luego por Juan Díaz de Solís hasta tomar El Patagónico y se reconducieron por Kennedy para marchar luego por Polonia y encontrarse con la feligresía de la Parroquía «Nuestra Señora de Lourdes» del barrio Quirno Costa.
Durante este recorrido, y concentrados en la oración propia del viernes santo, se hicieron las representaciones de las restantes estaciones. En la parada número 4 Jesús encuentra a su Santísima Madre; en la quinta estación Simón el cirineo le ayuda a llevar la cruz; en la sexta la Verónica limpia el rostro de Jesús y en la séptima Jesús cae por primera vez, mientras en la octava estación las mujeres de Jerusalén lloran por Jesús.
Así, siguiendo el orden cronológico del Vía Crucis, en la novena estación Jesús cae por tercera vez; en la décima es despojado de sus vestiduras y en las últimas estaciones es clavado en la cruz y muere. La multitud también participó de las estaciones 13 y 14 cuando Jesús es colocado en el sepulcro.
La cruz de la muerteLa comunidad parroquial «Santo Domingo Savio» también realizó este año la tradicional procesión en oración hacia el cerro, donde este año se enclavó una cruz como símbolo de la cultura de la muerte que se promueve a partir de determinados valores instalados en nuestra sociedad.
La multitud partió de la parroquia y recorrió el camino alternativo hasta llegar a la cumbre donde emplazó la cruz que tenía adherida distintas representaciones de la muerte. De esta manera, esa comunidad religiosa también se sumó a las actividades previstas para el viernes santo.
Retomando los dichos de Juan Pablo II, los fieles manifestaron que «vivimos en una cultura de la muerte que es contraria a los valores de la solidaridad».
Entonces, allí en la cruz colocaron sus intenciones con signos de muerte, miseria y pecado y luego evocaron las restantes estaciones del vía crucis, que concluyó con una suelta de globos anunciando la resurrección de Jesús, tras el sábado de gloria.
Créditos:Publicado en el Diario El Patagónico (07/04/07)
|
|
|