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En una ceremonia protocolar, fue habilitada ayer como piloto de transporte Twin Otter la alférez de 26 años Débora Pontecorvo, que se convierte así en la primer mujer argentina en abrazar esta profesión.La joven militar es oriunda de Buenos Aires y tiene incorporada la tradición aeronaútica ya que su padre y su hermano pertenecen a la fuerza.
El curso lo realizó en Córdoba, mientras en Comodoro Rivadavia concretó la especialización en el rubro de transporte.
Débora reconoce que desde chica sintió muy arraigada la vocación militar y por eso apenas terminó el secundario se sumó a la Fuerza Aérea.
En relación a su actual situación de revista, aclaró: «todavía no terminó el curso, sólo fui habilitada como segundo piloto Etapa II y el año que viene probablemente sea la culminación».
No obstante, Pontecorvo asegura que este avance en su carrera, «me pone muy feliz porque es un primer paso que acabo de dar».
Asegura que no le resulta extraño que le pregunten cómo es ser la primer mujer piloto de la Fuerza Aérea y a los que lo hacen les dice: «estoy contenta; para mí es un orgullo».
Si bien Pontecorvo es una mujer de pocas palabras, asegura que su objetivo inmediato es terminar este curso de transporte y «ver de a poco lo que el destino me va dando, y cumplir satisfactoriamente todo lo que hago».
Estudio y sacrificio han sido las bases de la carrera de esta mujer.
Al menos así lo define ella al sugerir a otras interesadas a incursionar en la aviación que «si les gusta, lo deben hacer tranquilas, que con mucho estudio y un poquito de sacrificio, como en cualquier carrera, lo van a poder hacer y van a recibir muchas satisfacciones».
Asegura que su familia la respaldó en todo momento y ayer compartió el momento de su habilitación con sus padres que vinieron especialmente desde Buenos Aires para la ceremonia.
De su vida personal, Pontecorvo relató que su hermano -de igual profesión- reside en Reconquista y asegura que su futuro le prevé distintas residencias ya que «a medida que vas cumpliendo etapas hay diferentes destinos, pero más adelante veré».
Según dijo, hay otras tres mujeres que están haciendo el curso de piloto, aunque ella es la única que hizo la especialización.
La alférez relata que dentro de la fuerza no se hace diferencias. «Hace bastante que se incorporó a la mujer, así que estamos los dos (hombres y mujeres) trabajando en conjunto, formando equipos y muy bien».
Los nuevos aviadores recibieron premios y distincionesEl acto fue presidido por el director general de LADE, brigadier Daniel Llera; el jefe del Grupo Aéreo 9, Francisco Meglia, el jefe de la IX Brigada Aérea, comodoro Carlos Cavallo, y el presidente de la Asociación de Tripulantes de Transporte Aéreo, brigadier Jorge Martínez.
En el marco de la ceremonia se distinguió a quienes aprobaron el curso de procedimiento para aviadores de transporte: capitán Ezequiel Rodríguez Cisneros y teniente Carlos Almada.
Este último también recibió el premio «Comando de Operaciones Aéreas», por el más alto promedio general de egreso y el premio LADE al más alto promedio en instrucción áerea.
A la vez, el capitán Rodríguez recibió el premio «Asociación de Tripulantes de Transporte Aéreo» por el más alto promedio general de instrucción académica.
También se entregaron las habilitaciones a quienes se encuentran haciendo el curso de la Etapa II como segundos pilotos para aviadores de transporte Twin Otter.
Los nuevos Alférez son Juan Scheller, Víctor Meza, Débora Pontecorvo, Sebastián Raptopulus, Emiliano Fiallegas, Ariel Basseterre, Juan Cervi, Juan Antunez, Carlos Bruno, José Palmieri, José Comincini, Luciano Gómez, Luciano Viada, Juan Cooke, Mariano Ruíz, Esteban La Cona, Luciano Santonato y Pablo Reynoso.
Distintivo AntárticoDurante el acto se entregaron diplomas y distintivo antártico de primera categoría al personal militar de la Fuerza Aérea perteneciente a la IX Brigada Aérea que el 3 de agosto, luego de 37 días, logró la puesta en servicio del Twin Otter matrícula T-82, despegando desde el glaciar en la Base Marambio.
Sucede que el 27 de junio la aeronave asignada para cumplir la Campaña Antártica sufrió un accidente durante el anevizaje en un glaciar, sufriendo daños en el tren de aterrizaje y quedando inmovilizada, expuesta a las inclemencias climáticas.
Los tripulantes distinguidos fueron Juan Copetti, Jorge Fernández, Ricardo Grunert, Daniel Pintos, Julián Alles, Agustín Aguirre, Daniel Pérez, Aldo Latorre, Javier Chirino, René Mella y Walter Trevisán.
Para finalizar el encuentro, se procedió a la entrega de la distinción tripulante distinguido en el Sarm DHC-6 Twin Otter y Fokker F-27 por parte de la Asociación de Tripulantes de Transporte Aéreo.
En tanto, el premio «Municipalidad de Comodoro Rivadavia» lo recibió el instructor de vuelo destacado del Escuadrón CEPAT, teniente Gastón Trucco.
ReconocimientoLas palabras alusivas estuvieron a cargo del jefe del Grupo Aéreo 9, José Meglie, quien reconoció el logro de sus camaradas en esta graduación de dos nuevos aviadores de la especialidad Transporte Militar.
Meglie destacó que este curso permitió ejercitar el sistema de instrucción del Escuadrón CEPAT para la tarea que seguirá en la segunda mitad del año.
También celebró la habilitación de la Etapa II-copiloto para 18 aviadores militares que se instruyen en el CEPAT, meta intermedia en su camino a lograr la especialidad de transporte, dijo.
Asimismo, sostuvo que «no quiero dejar de destacar en pocas palabras el heroico rescate del Twin Otter que después de 37 días en el glaciar de la Base Antártica Esperanza, soportando condiciones meteorológicas y logísticas extremas, fue trasladado a la Base Marambio donde ayer (por el martes) hizo su primer vuelo, luego del esfuerzo de mantenimiento del Grupo Técnico junto con el Area de Material Quilmes y el apoyo incondicional del personal del Ejército Argentino allí desplegado, hecho que nos llena de orgullo».
Crédito:Publicado en el Diario El Patagónico. (21/11/07)
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