El ministro de Salud de Santa Cruz, Juan Carlos Nadalich, confía en que la ampliación del Hospital Zonal «Pedro Tardivo» de esta ciudad pueda completarse antes de finalizar el año, según lo que contó a Diario Patagónico.

En rigor, como esta obra -que se inició en marzo- tiene un plazo de ejecución de 18 meses, lo que podrá inaugurarse antes de diciembre será sólo el nuevo sector de guardias.

Paralelamente, Nadalich confirmó que se nombrarán nuevos profesionales.

También la ministro de Desarrollo Social de la Nación, Alicia Kirchner, se refirió a este tema en su reciente visita recalcando que la necesidad se debe al «enorme crecimiento poblacional» de la zona.

La ampliación buscará descongestionar, sobre todo, los servicios de atención externa y de internación, en cuyas habitaciones se trabaja en exceso, bajo el no querido sistema de «cama caliente». Pero lo peor es cuando no hay camas, ya que deben derivarse, a su vez, a los pacientes a otros hospitales de la región, sobre todo a Comodoro Rivadavia.
 

Ampliación

Las autoridades sanitarias aseguran que con la obra de ampliación se están construyendo 17 nuevas habitaciones en planta alta, lo que implicará espacio para 34 camas. Allí se internarán los pacientes de las áreas clínicas y quirúrgicas, dejando el ala actual a pediatría y maternidad.

También se levantan nuevos consultorios, los cuales estarán en planta baja y uno de éstos será equipado para un segundo espacio de oftalmología.

Conjuntamente se erigirá un nuevo sector de administración y otro para servicios como esterilización, lavadero y otros auxiliares.
 

Carencia de profesionales

El director del hospital, Diego Ciolfi, reconoció que «equipamiento hay mucho, faltan recursos humanos y espacios».

A pesar de que este nosocomio (que tiene un nivel de complejidad 8) posee en el área quirúrgica cuatro cirujanos generales (uno de ellos con especialidad pediátrica), tres de traumatología, un urólogo, un otorrinolaringólogo y dos oftalmólgos, faltan más profesionales, pero la oferta de ellos es mínima en todo el país.

Lo positivo es que hace diez días se incorporó un neurocirujano, luego de varios años de que este servicio tan delicado lo cumplía un especialista que venía de Comodoro. También se designará un especialista en Diagnóstico por Imágenes.

El proceso para encontrar nuevos médicos es lento. En ese sentido, Ciolfi admitió que los especialistas recién recibidos en otras provincias «ven que el sueldo aquí es mejor, pero no tienen contemplado desarraigarse de sus lugares de origen».

Aunque agregó que «probablemente el tema de la vivienda» (los altos alquileres) sea otro motivo que los desalienta a venir a residir en la zona.

En el área de guardias, asimismo, se cuenta «con el plantel ajustado», y también hacen falta más médicos generalistas en los Centros Integradores Comunitarios (CIC) situados en distintos barrios y que efectúan la Atención Primaria de la Salud.
 

Enfermería

En lo concerniente al plantel de enfermeros y auxiliares, por el momento, es de 146 profesionales, pero muchos trabajan en centros de atención primaria o en tareas livianas en consultorios (por «carpeta médica»); pero se harán nuevos nombramientos en estos meses, habida cuenta de la necesidad en terapia intensiva, neonatología o clínica médica.

Además, es relevante la carencia en otros servicios, como el de oftalmología, cuyos pacientes deben acudir al hospital para sacar turno a las tres o cuatro de la madrugada, y aún así muchos deben volverse sin la atención. Por ahora atienden sólo dos especialistas de ojos allí.

La enorme demanda de este servicio se debe «a que la Caja de Servicios Sociales, que es la más utilizada por los habitantes de aquí, no cerró convenio con los oftalmólogos, por lo que la gente debe volcarse al Hospital», explicó Ciolfi.

Cabe acotar que la consulta de un oftalmólogo en un centro privado llega a superar los cien pesos.
 

Tomógrafo

El complejo servicio de terapia intensiva continuará en el mismo lugar. Pero allí todavía hay una deuda pendiente: el tomógrafo, elemento muy utilizado en esa área.

Sobre esto, Ciolfi dijo que mañana se hará el llamado a licitación para la compra, «y de allí habrá que esperar noventa días para contar con el mismo dentro del hospital».

El tomógrafo que estaba funcionando se rompió, por lo que los pacientes actuales deben ser trasladados a una clínica privada para el estudio y luego retornar al hospital.  

Créditos:

Publicado en el Diario El Patagonico (19/10/06)