Las plantas simples que carecen de clorofila se llaman hongos. Los tres grupos principales de plantas no verdes, las bacterias, los "mohos" y los hongos propiamente dichos, tienen poco en común, salvo la nutrición heterotrófica, necesaria por la ausencia de clorofila.

A causa de ello, y por el hecho de que cada grupo ha evolucionado independientemente, se clasifican como fílum separados.

Algunos se nutren de sustancias orgánicas en descomposición; son los saprófitos o saprobios.

Otros se nutren a expensas de individuos vegetales o animales a los que perjudican; son los parásitos.

Pueden ser unicelulares o multicelulares. En este último caso tampoco hay diferenciación de trabajo entre las células que los forman.

Las células de los hongos se disponen unas a continuación de otras y originan filamentos llamados hifas (del gr. hyphé, hilo de tejido).

Estos hilos se entrecruzan, forman una trama y constituyen el micelio (del gr. mykes, hongo; y elyo, enredo).

El micelio es el cuerpo o talo del hongo.

La reproducción es por esporos, pero pueden reproducirse sexualmente; mediante unión de gametos que forman huevos o cigotas.

Hay hongos de organización mas compleja, como el Moho.