"Portal a los Hielos Eternos" |
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Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano. |
En el año en que se conmemoran los 250 años del nacimiento y los 200 años de su fallecimiento, queremos compartir el pensamiento del General Manuel Belgrano reflejado en estas frases:
- Soy muy amante de que todas las ciencias se sepan por principios y nadie pueda tener conocimiento de aquellas sin estar instruidos en éstos.
- El hombre, por su naturaleza, aspira a lo mejor, y, por consiguiente, desea tener comodidades y no se conforma sólo con comer.
- El honor y el premio son los dos resortes más a propósito, para que no se adormezca el espíritu del hombre.
- Bien puede pesarle a todos los demonios, pero en mí no tendrán jamás cabida
- El miedo sólo sirve para perderlo todo.
- Un pueblo culto nunca puede ser esclavizado.
- No es lo mismo vestir el uniforme militar, que serlo.
- Pues deseo que todos sepan el bien para alegrarse, y el mal para remediarlo, si aman a su patria; así que nada oculto ni ocultaré jamás.
- Trabajé siempre para mi patria poniendo voluntad, no incertidumbre.
- Los gobiernos ilustrados, conociendo las ventajas que prometen el premio y el honor, han echado mano de estos principios motores del corazón humano para todas las empresas.
- Fundar escuelas es sembrar en las almas.
- El estudio de lo pasado enseña cómo debe manejarse el hombre en lo presente y por venir.
- No busco glorias si no la unión de los americanos y la prosperidad de La Patria.
- Me glorío de no haber engañado jamás a ningún hombre y de haber procedido constantemente por el sendero de la razón y de la justicia, a pesar de haber conocido la ingratitud.
- Quiero volar, pero mis alas son chicas para tanto peso.
- Sin educación, en balde es cansarse, nunca seremos más que lo que desgraciadamente somos.
- No hubiese un español que no creyese ser señor de América, y los americanos los miraban entonces con poco menos estupor que los indios en los principios de sus horrorosas carnicerías, tituladas conquistas.
- ¿Qué otra cosa son los individuos de un gobierno, que los agentes de negocios de la sociedad, para arreglarlos y dirigirlos del modo que conforme al interés público?.
- Nadie me separara de los principios que adopté cuando me decidí a buscar la libertad de la patria amada, y como éste sólo es mi objeto, no las glorias, no los honores, no los empleos, no los intereses, estoy cierto de que seré constante en seguirlos.
- [Mis ideas] no se apartan de la razón y justicia que concibo, ni jamás se han dirigido a formar partidos, ni seguirlos.
- Esa paz tan estimable se compra al duro precio de la sangre y de la muerte.
- La vida es nada si la libertad se pierde.
- Este país, que al parecer no reflexiona ni tiene conocimientos económicos, será sin comercio un país desgraciado, esterilizada su feracidad y holgando su industria.
- Deseo ardorosamente el mejoramiento de los pueblos.
- Su único fin debe ser por un avenimiento… o veremos transformarse el país en puros salvajes.
- Que no se oiga ya que los ricos devoran a los pobres, y que la justicia es sólo para aquéllos.
- No hallo medio entre salvar a la patria o morir con honor.
- No busco el concepto de nadie, sino el de mi propia conciencia, que al fin es con la que vivo en todos los instantes y no quiero que me remuerda.
- Mis intenciones no son otras que el evitar la efusión de sangre entre hermanos.
- A quien procede con honradez, nada debe alterarle. He hecho cuanto he podido y jamás he faltado a mi palabra.
- Ni la virtud ni los talentos tienen precio, ni pueden compensarse con dinero sin degradarlos.
- Desde la más remota antigüedad hasta nuestros días, la historia de los siglos y de los tiempos nos enseña cuánto aprecio han merecido todos aquéllos que han puesto el cimiento a alguna obra benéfica a la humanidad.
- Método no desorden; disciplina, no caos; constancia no improvisación; firmeza, no blandura; magnanimidad, no condescendencia.
- Nuestros patriotas están revestidos de pasiones, y en particular, la de la venganza.
- Sirvo a la patria sin otro objeto que el de verla constituida, ése es el premio al que aspiro.
- Todo depende y resulta del cultivo de las tierras; sin él no hay materias primeras para las artes, por consiguiente, la industria, que no tiene cómo ejercitarse, no puede proporcionar materias para que el comercio se ejecute.
- Me hierve la sangre, al observar tanto obstáculo.
- Parece que la injusticia tiene en nosotros más abrigo que la justicia. Pero yo me río, y sigo mi camino.
- Fomentar la agricultura, animar la industria y proteger el comercio son los tres importantes objetos que deben ocupar la atención.
- Estoy muy acostumbrado a contrastes y más espíritu tengo en ellos que en las prosperidades; me ocurre siempre en éstas que después del buen tiempo viene el malo y en éste que ha de venir aquél.
- Es preciso contener la venganza y pedir a Dios que la destierre, porque de no ser así, esto es de nunca acabar y jamás veremos la tranquilidad.
- Nada importa saber o no la vida de cierta clase de hombres que todos sus trabajos y afanes los han contraído así mismo, y ni un sólo instante han concedido a los demás; pero la de los hombres públicos, sea cual fuere, debe siempre presentarse, o para que sirva de ejemplo que se emite, o de una lección que retraiga de incidir en sus defectos.
- El modo de contener los delitos y fomentar las virtudes es castigar al delincuente y proteger al inocente.
- En vano los hombres se empeñan en arrastrar a su opinión a los demás, cuando ella no está cimentada en la razón.
- La sombra de la Junta que traigo conmigo hace prodigios; la Junta será la vencedora, no yo; su nombre sólo con el aspecto de nuestros bravos atrae a los afectos y aterra a los malvados.
- Que nos entristezcamos o nos alegremos, la mano que todo lo dirige, no por eso va a variar: esta es una verdad evangélica.
- Los hombres no entran en razón mientras no padecen.
- En mis principios no entra causar males sino cortarlos.
- El interés es el único móvil del corazón del hombre y bien manejado puede proporcionar infinitas utilidades.
- Era preciso corresponder a la confianza del pueblo, y me contraje al desempeño de esta obligación, asegurando, como aseguro, a la faz del universo, que todas mis ideas cambiaron, y ni una sola concedía a un objeto particular, por más que me interesase el bien público estaba a todos instantes ante mi vista.
- La agricultura es la madre fecunda que proporciona todas las materias primeras que dan movimiento a las artes y al comercio.
- Lo que creyere justo lo he de hacer, sin consideraciones ni respetos a nadie.
- Se deben poner escuelas gratuitas para la niñas, de se les enseñará la doctrina cristiana, a leer, a escribir, coser, bordar, y principalmente inspirarles amor al trabajo, para separarlas de la ociosidad, tan perjudicial o más en las mujeres que en los hombres.
- Yo no sé más que hablar la verdad y expresarme con franqueza esto me lo he propuesto desde el principio de la revolución y he seguido y seguiré así.
- Todas las dificultades se vencerían rápidamente si hubiera un poco de interés por la patria.
- El bien público está en todos los instantes ante mi vida.
- Se apoderaron de mí las ideas de libertad, igualdad, seguridad, propiedad, y sólo veía tiranos en los que se oponían a que el hombre fuese donde fuese, no disfrutase de unos derechos que Dios y la naturaleza le habían concedido.
- Mis intenciones no son otras que el evitar la efusión de sangre entre hermanos.
- Ninguna cosa tiene su valor real, ni efectivo en sí mismo, sólo tiene el que nosotros le queremos dar; y éste se liga precisamente a la necesidad que tengamos en ella; a los medios de satisfacer esta inclinación; a los deseos de lograrla y a su escasez y abundancia.
- ¡Juro a la patria y a mis compañeros, que si a las tres de la tarde del día inmediato el virrey no hubiese renunciado, a fe de caballero, yo le derribaré con mis armas!
- Mucho me falta para ser un verdadero padre de la patria, me contentaría con ser un buen hijo de ella.
Créditos:
- Publicado en el Sitio Universidad de la Defensa Nacional. (18/06/20).
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