A las 17:30, los miembros de la Parroquia San Juan Bosco partieron hacia la Iglesia de la Virgen del Valle, junto a más de 300 peregrinos provenientes de diferentes barrios de esta ciudad.

El vía crucis viviente se realizó sobre el acoplado de un camión y fue escenificado por un grupo de jóvenes del Centro de Estudios Municipales Por el Arte (Cemepa). Entre oraciones y paradas ante cada estación, los adolescentes interpretaban los pasajes bíblicos del Camino al Calvario, y la Resurrección.

Las actividades religiosas previstas para hoy, día de Vigilia Pascual, se compondrán sólo de tres misas que se realizarán paralelamente a las 20 en la Parroquia; en la Iglesia de la Virgen del Valle, donde acudirá la comunidad boliviana devota de Nuestra Señora de Copacabana, junto con los fieles de la capilla de Nuestra Señora del Carmen.

La otra celebración litúrgica se efectuará en el Colegio San José Obrero, en donde está programada la participación de las capillas y oratorios del Sagrado Corazón, Señor del Milagro y Virgen del Milagro, Buen Pastor y San Cayetano.

En esta Semana Santa, los feligreses percibieron una gran ausencia, que es la del párroco Juan Luzovec. Por problemas graves de salud, este sacerdote de más de 70 años está hace varios días en Buenos Aires para un tratamiento médico. Quien lo reemplaza en sus funciones es el vicario parroquial, el padre Ramón Osikowski. También oficia misas y sacramentos el sacerdote Martín Stugel y, desde la Casa Salesiana, el padre Carlos Regueiro.

Sin embargo, los sacerdotes, salesianos todos ellos, a veces se encuentran sobrecargados en sus tareas religiosas. En efecto, un sacerdote proveniente de Mendoza, el padre Luis Olguín, quien está visitando a familiares en esta localidad, ha colaborado en estas últimas jornadas.

Igualmente, los diáconos Mario Sosa, Guillermo Anderson y Julio Reyes se multiplicaron para organizar y coordinar las actividades de esta fiesta que, para la Iglesia, es la principal.
 

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Publicado en el Diario El Patagónico. (07/04/07)