Mientras las compañías telefónicas ya no saben qué servicios agregar a los celulares, un estudiante universitario tucumano diseñó un programa informático que le indica al usuario cómo proceder en caso que tenga que prestar primeros auxilios en la vía pública.

Pablo Santiago Díaz, un alumno de Ingeniería Biomédica de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), aprovechó los tiempos libres que le dejaba su carrera para desarrollar un software sencillo y gratuito, capaz de ser utilizado por cualquier titular de una línea móvil en cuestión de minutos.

Tal fue la innovación que su creación fue la sorpresa en las últimas Jornadas de Jóvenes Investigadores de la UNT y la Asociación de Universidades Grupo Montevideo (AUGM), donde el programa captó la atención de miles de jóvenes como él que se reunieron a presentar sus mejores inventos.

"No sé por qué le interesó a tanta gente... ¡es súper simple!", asume Pablo, sin desconocer que la clave de su plan fue poner en marcha un sistema que aún nadie había pensado antes: explicar en forma clara qué pasos seguir para brindar asistencia en casos extremos.

Además, el universitario construyó otro software que tiene direcciones, teléfonos y mapas de ubicación de todos los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) de Tucumán, e incluso permite realizar búsquedas según sectores.

Pablo decidió esparcir sus creaciones sin trabas: "Quiero que los programas sean gratuitos. Todo celular que se fabrique debería venir con un manual de primeros auxilios", indica.

Para este joven de 25 años y alumno de la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología, "el celular no sólo debe traer juegos o máquina de fotos: también puede cumplir otras funciones. Si ahora tocás tu bolsillo, ahí está el celular. Es la tendencia", augura Díaz.
 

Trabajo veloz

Un día se le ocurrió la idea y dos meses después el programa de primeros auxilios estaba funcionando.

"Está basado exclusivamente en imágenes, porque en casos de crisis a uno se le nubla la vista como para leer", argumenta Díaz respecto del software, que contiene el protocolo de acción establecido por la Cruz Roja Internacional.

Con respecto al programa de los CAPS, considera que será un buen aporte para que la gente sepa dónde le conviene ir y no pierda tiempo en casos de emergencia.

También prioriza la simpleza: además de teléfonos, direcciones y especialidades que se atienden en cada lugar, muestra mapas (sin necesidad de estar conectado a Internet) de locación de cada centro de asistencia.

Díaz hizo ambos desarrollos con Java, un lenguaje de programación simple y gratuito. "Todos los teléfonos móviles los pueden usar sin problemas", cuenta el joven que, de hecho, ya tiene funcionando los dos programas en su celular.

"La sociedad paga mis estudios con sus impuestos. Entonces, yo tengo que devolverle algo que ayude a resolver algún problema", dice Díaz, cuya vocación (a medio camino entre las nuevas tecnologías y la medicina), hace que el factor tiempo sea determinante:

"En este caso, los resultados deben ser inmediatos". Y los programas que ideó bien cumplen el cometido: ponen la solución al alcance de la mano.  

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Publicado en el Diario Clarín. (12/09/07)